6.11.18

Problemas del primer mundo


Los baños del festival están sucios
La bebida es demasiado cara
Mañana tengo que hacer un trabajo
Debería estudiar más inglés
¿Me compro este u otro coche?

Es lo que tiene vivir en la abundancia

Vivir en la opulencia nos hace olvidar lo que tenemos

Y olvidar lo que no tienen muchas personas en Ghana, India, África o Brasil

El principal problema del primer mundo es la inconsciencia

El quejarnos por banalidades

Cubrir las necesidades básicas y después centrarnos en el crecimiento personal y la autorealización,

Nos volvemos egoístas y ególatras,

Porque la justicia cuando tus necesidades básicas están cubiertas pierde el sentido

Y justicia es que los baños estén limpios
Que la bebida sea accesible
Tener más tiempo para no tener que sucumbir al coste de oportunidad
Que me pueda comprar el coche que deseo (el que poder y el marketing me han inculcado)

Pero, ¿no es acaso justo contribuir a la mejora de la vida de personas en riesgo?
¿No es justo que el mundo experimente un crecimiento sostenible?
¿Es justo sinónimo de imposible, irreal y ficticio?
Y más ahora
Y más en estos países desarrollados
Con patrocinios, con industria, 
Con cultura, con conocimientos

¿Es erudito sinónimo de justo? ¿Es la cultura directamente proporcional a la justicia?
El tiempo que se le dedica al desarrollo de conocimientos técnicos debería ser proporcional al de habilidades humanistas

Vivimos en la riqueza mientras en el mundo sigue existiendo hambre  
Es un sinsentido que continuemos devorando alimentos, devorando libros, y que culturizarnos no vaya ligado a tomar conciencia
Al final parece que si está en los libros es justo; es irreal, imposible y ficticio

Hay obesidad mientras hay inanición
Mala actitud mientras tenemos vida 
Inmuebles disponibles, gente en la calle 
Miedo por perder trabajos, estancamiento y conformismo
Odio al diferente, cuando todos lo somos
Tristeza por quien no nos recuerda, aversión por quien no quiere recordar las atrocidades que le ha tocado vivir

Debatir es infame, desamparar a quien no tiene las mismas ideas y valores está a la orden del día
  
Nada nuevo ha quedado aquí plasmado. Y tal vez ello sea el problema del primer mundo: que conozcamos estas ideas, que incluso comulguemos con ellas, pero que nada hagamos por cambiar el statu quo; porque al final el sistema nos abraza con tanta intensidad que nos impide discernir la realidad de la fantasía inculcada.


Martina Romá