28.6.15

Siamo chi siamo




   Martina comenzaba a entenderse.
Ella creía haber estado creciendo todo este año.
Y así era, pero en este preciso momento se veía reflejado el esfuerzo.
Las noches leyendo sola en su cama, las numerosas películas de los domingos y los paseos en metro contemplando a las personas de alrededor le habían permitido pensar mucho.
Hasta llegar al punto en el que se había cuestionado si daba importancia a lo que realmente merecía la pena o se dejaba llevar por sandeces.
De esta manera, se había centrado en aprovechar lo que le aportaba y dejar ir aquello que le importunaba. Era su fórmula personal de la felicidad.
Y desde que la había encontrado disfrutaba de las pequeñas cosas y de los pequeños momentos.
Una cena, una lectura, una conversación con quien acababa de conocer.
Parecía que le había picado el mosquito de la intriga y buscaba hallar la explicación a lo desconocido.


El otro día la vi de lejos y parecía otra persona. Se le veía cómoda conociendo a alguien y me entristecí un poco porque había dejado de ser aquella niña que necesitaba mi ayuda para todo.
Hablaba con un italiano que se llamaba Carlo y parecía impresionada con la conversación. Me pregunté de qué hablarían y me acerqué un poco.
La verdad es que no entendía mucho porque hablaban de algo de la verticalización del mercado o algo así y no comprendía el porque de tanto interés.
El tal Carlo parecía contarle que había tenido una idea revolucionaria y con 23 años tenía su propia empresa.
Se iban uniendo a la conversación más amigos de este emprendedor que formaban parte del equipo directivo y de vez en cuando Carlo interrumpía a sus colegas para dirigirse a Martina diciendo: atenta a esto, es un concepto económico.
¡Claro! Era para lo que Martina estaba estudiando. Era su sueño y él lo había conseguido.
Además la conversación ya no giraba solo en torno a esta idea que estaban explotando, a los artículos que habían escrito sobre ellos o cómo surgió todo.
Ahora hablaban de futuros proyectos, nuevas ideas que compartía con ella, y en su interior Martina pensaba: esto sí que es interesante.


Le explicaba que su secreto era no pretender cubrir completamente todo el mercado, sino concentrarse en una parte que fuera rentable y satisfacer las necesidades de este grupo de consumidores. 
Conceptos que llevaba años estudiando, pero que después del examen parecían quedarse en los apuntes.
Le contó que una oportunidad emergente era el mercado de vegetarianos: green. 
Martina estaba extrañada con esta afirmación. Preguntó si era de aquellos que no comían carne pero él señaló la barbacoa  que estaba preparando, rieron y continuaron charlando sobre aquella revolución de ideas que no la dejaban indiferente.

Estaba contenta de poder compartir estos momentos. Un año atrás estaba cegada con una realidad que difería completamente de esto.
No había sido sencillo, pero le satisfacía saber que el haber llegado hasta allí era por mérito propio.
Martina se evadió unos instantes para darse cuenta de que somos quien somos, nuestra personalidad se va desarrollando, pero es un trabajo de fondo al que contribuyen los años, las experiencias y las personas.
Respecto a lo material, no perdura, así que prefería basar su vida en las relaciones.
M. se preguntaba si ella había sido siempre así y ahora era cuando había descubierto su ru(t)ina preferida: esa costumbre de emocionarse conociendo a personas, viviendo, lanzándose a vacíos, recuperándose de los golpes, disfrutando de sencillamente ser quien era…
Siamo chi siamo


Carlo la miró y con una sonrisa le increpó, en che sei pensando tesoro?
Y ella compartió con aquel italiano sus pensamientos, y le dejó ver con claridad como era nuestra pequeña/creciente Martina.

Non siamo quello che gli altri desideravano che fossimo. Siamo chi abbiamo deciso di essere.
Siamo chi siamo repitió una vez más en su interior.


Martina Romá.

15 comentarios:

  1. Muy buen texto! Me identifiqué muchísimo,especialmente con la primera mitad,con esa mirada hacia adentro.. Precioso!

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    1. ¡Muchas gracias! Darse cuenta de los errores y querer subsanarlos es algo primordial para crecer!

      Un abrazo.

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  2. Desee ser Martina! muy lindo texto
    besos

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    1. Gracias Sophie, puedes convertirte en lo que desees :)

      Un beso!!

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  3. Qué rutina tan bonita. Si te das cuenta de que ya no te emocionas por nada, ni por nadie, estás perdido.

    Besos

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    1. Muchas gracias Elendilae, ¿la felicidad reside en esta rutina alternativa?
      Muchos besos.

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  4. Hermoso! Me he identificado de una manera increible. No dejes nunca de escribir, que tu blog se ha convertido en uno de mis favoritos.
    Besitos cariño

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  5. Muy lindo! mirarse el interior el camino a entenderse.

    besos

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    1. Es un camino complicado y largo, pero tienes que comenzar por alguna parte !

      Muchas gracias y un abrazo.

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  6. ¡Hola, Martina! ❤
    Lo primero que quería decirte es que... ¡muuuuchas gracias! Te agradezco muchísimo haber pasado por mi rinconcito y comentar, tú siempre tan encantadora... Sé que es un poco tarde para decirlo, pero estaba de viaje y por eso no había podido pasar por este maravilloso blog. Ahora que he vuelto me alegro muchísimo de estar por aquí, porque tus palabras siempre me enseñan muchas cosas, y escribes muy bonito.

    Respecto a la entrada, me ha encantado leerla porque además de conocerte un poco más, creo que me has enseñado cosas de mí misma que no sabía. Es totalmente cierto eso que escribes, ``siamo chi siamo´´, creo que no podemos pretender ser otros o dejarnos llevar por gente que nos aparta del camino hacia nuestros sueños. Es increíble lo bien que has descrito esa edad en la que por fin, tras tanta búsqueda comenzamos a saber quiénes somos, nos encontramos y somos capaces de saber hacia dónde dirigir nuestras vidas. Qué bonito es vivir emocionándose, buscando nuevas experiencias y nuevas personas tan geniales como Carlo (que, debo decirlo, me encanta, tengo debilidad por los italianos jaja).

    Por cierto, he publicado una nueva entrada con noticias y novedades que llevaré a cabo en estos próximos meses, por si quieres pasarte (pero no es ninguna obligación, yo con haberme dejado caer por aquí ya estoy encantada de la vida...).

    Un abrazo enorme, que seas muy feliz. ^^

    (misspoessia.blogspot.com)

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    1. Muchísimas gracias!!
      Pasarme por tu blog es un placer :)
      Me gusta que leyendo además de conocerme más lo hagas de ti misma, esas cosas son importantes para saber donde queremos llegar y cuales son nuestras posibilidades.
      Carlo es... un italiano increíble, aunque con defectos como cualquiera.

      Un beso muy fuerte y nos leemos!!

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  7. ¡Qué hermoso texto, y qué gran deseo de ser Martina! Preciosa la manera en que plasmaste ese momento de la vida donde TODO es sobre conocernos y saber quiénes somos y qué queremos. Pero lo más lindo, cómo lo alcanzamos.
    Muchas gracias por compartir el texto :)
    Besos ^^

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  8. Me ha encantado tu texto Martina!! Hacia un montón que no pasaba por aquí, pero ya no me marcho más.
    Un besito enorme!!

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  9. Al final es el tiempo que pasamos con las personas y las vivencias que tenemos con ellas lo que nos crea recuerdos en la memoria. A veces hay que saber soltar a la soledad y empezar a disfrutar de lo que el mundo nos ofrece en compañía.

    Salud.

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